Fotografía ilustrativa del artículo

¿Qué relación existe entre la salud de las plantas y la biodiversidad?

Erradicar el hambre y la pobreza,  garantizando que los alimentos que consumimos sean seguros y no sean perjudiciales para nuestra nuestra salud, y frenar la destrucción del medio ambiente. Son frentes abiertos para el ser humano desde hace décadas. La protección de las plantas supone una de las líneas de acción a través de la cual abordar estos retos globales, ya que recursos fundamentales como el oxígeno que respiramos, nuestros alimentos y medicinas, incluso materiales de construcción, son servicios ecosistémicos obtenidos a través de los organismos vegetales.

Los peligros transmitidos por los alimentos pueden ser de naturaleza microbiológica, química o física y con frecuencia son invisibles a simple vista; bacterias, virus o residuos de pesticidas son algunos ejemplos. La inocuidad de los alimentos juega un papel fundamental a la hora de garantizar la seguridad de los alimentos en cada etapa de la cadena alimentaria: desde la producción hasta la cosecha, en el procesamiento, el almacenamiento, la distribución; hasta el final de la cadena, en la preparación y el consumo (Naciones Unidas, 2020).

En la primera etapa de esta cadena para garantizar la inocuidad de los alimentos, mantener comunidades vegetales sanas implica mantener comunidades vegetales biodiversas. ¿Por qué? Las comunidades con gran variedad de especies presentan un amplio rango de soluciones ante amenazas como plagas y enfermedades, que causan importantes impactos en los cultivos y en la soberanía alimentaria, sobre todo en un contexto de cambio climático. La capacidad que tiene la biodiversidad para mantener nuestros ecosistemas sanos se ve significativamente reducida en comunidades homogéneas y con un escasa riqueza de especies.

No cabe duda de que nos encontramos ante un gran reto: conservar la biodiversidad implica conservar la salud de las plantas.

Para saber más:

Día Mundial de la Inocuidad de los Alimentos, 7 de junio
FAO
OMS