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El Grupo de Investigación en Sanidad Animal y Zoonosis (GISAZ) de la Universidad de Córdoba, en colaboración con la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía y los Centros de Recuperación de Especies Amenazadas (CREAS) de las provincias afectadas, realizó un estudio en el primer semestre de 2021 en el que han evidenciado que en el suroeste de Andalucía existe una alta exposición al Virus del Nilo en caballos y aves silvestres. La presencia de anticuerpos alcanzó el 38% de los caballos y el 19% de las aves silvestres estudiadas en el suroeste de Andalucía.
Se trata del denominado Evento Jenkyns, ocurrido hace unos 183 millones de años, que sirvió para configurar los grupos de dinosaurios que dominaron la Tierra hasta su extinción hace 66 millones de años. El paleontólogo de la Universidad de Jaén, Matías Reolid, junto con investigadores de las universidades de Kiel y Bristol, muestra por primera vez cómo un evento de calentamiento global, ocurrido a finales del Jurásico inferior, modeló este cambio en la composición de los ecosistemas continentales que afectó tanto a plantas como a dinosaurios herbívoros y carnívoros.
El litoral gaditano cuenta en la actualidad con aproximadamente unas 300 parejas reproductoras de chorlitejo patinegro en un total de 21 núcleos reproductores distintos, principalmente localizados en el litoral de Tarifa, El Puerto de Santa María, Rota, Barbate y San Fernando y tienen como principal amenaza -repetida a lo largo de todo la costa – el turismo masificado, la presencia de perros sueltos y el trabajo de maquinaria pesada en playas. Un estudio de la Universidad de Cádiz trabaja en la sensibilización y conservación de poblaciones reproductoras de esta ave amenazada.
Hoy, 24 de octubre, se conmemora el Día Internacional contra el Cambio Climático, una fecha para concienciar a la población sobre esta realidad que afecta a día de hoy a todo el planeta. Una variación a largo plazo del clima global capaz de afectar a la salud humana, al cultivo de alimentos, a la pérdida de biodiversidad... y, en definitiva, a nuestra actual forma de vida. En Andalucía, la comunidad científica lleva años estudiando cómo combatir este fenómeno y propone herramientas para frenar sus consecuencias.
Este abeto endémico de Andalucía, reliquia de la era Terciaria, está amenazado por el incremento de las temperaturas, la mayor duración e intensidad de las sequías y las olas de calor extremo. Una investigación liderada por las universidades Pablo de Olavide y Complutense de Madrid demuestra que algunos ejemplares de zonas muy afectadas por la sequía sobreviven contra todo pronóstico gracias a su genética.
Una investigación en la que participa el Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Sevilla (IRNAS/CSIC) identifica las zonas áridas del planeta sujetas a cambios bruscos de productividad. La investigación destaca que la presencia humana puede impedir la rápida recuperación de la vegetación en las tierras secas, lo que hace que los ecosistemas de estas zonas sean menos resistentes.
Un estudio liderado por el Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología (IRNAS) del Consejo Superior de Investigaciones Científicas identifica los puntos de máxima prioridad para la conservación en los trópicos, el norte de Europa y América, y Asia. El trabajo incluye más de 10.000 observaciones de biodiversidad e indicadores de servicios ecosistémicos en 615 muestras de suelo de todos los continentes.
Un estudio con participación de la Estación Biológica de Doñana (EBD) muestra que la presencia de hongos patógenos oportunistas en lesiones localizadas en la cavidad oral de los pollos de milano negro, Milvus migrans, se incrementa cuanto más degradado esté el hábitat en el que se desarrollan en los nidos. El estudio, realizado en el Parque Regional del Sureste de Madrid, donde los milanos anidan cerca de los ríos Manzanares y Jarama, y en el parque Nacional de Doñana, tiene aplicaciones en conservación ya que el nivel de afección y las especies de hongos detectadas en las aves pueden emplearse como indicadores del grado del deterioro de un hábitat.