
La Universidad de Jaén investiga sobre los agentes que afectan a la intensidad de la floración de especies en la Península Ibérica
La Universidad de Jaén participa en un estudio en torno a los agentes que influyen en la intensidad de floración de las especies en la Península Ibérica. El trabajo, llevado a cabo en colaboración con la Red Española de Aerobiología, se ha publicado recientemente en la revista Science Of The Total Environment.
En concreto, el profesor de Biología Animal, Biología Vegetal y Ecología de la UJA, Luis Ruiz Valenzuela, ha formado parte del grupo investigador de este proyecto, que ha liderado la Universidad de Córdoba.
El análisis, centrado en las tendencias de cambio sufridas en la floración de especies autóctonas a lo largo de las dos últimas décadas, se basa en la incidencia sobre ese fenómeno tanto del cambio climático como de las oscilaciones de presión en el Atlántico Norte (NAO). En ese sentido, el profesor de la UJA destaca que “en la Península, el escenario de cambio climático previsto se traduciría en un aumento de temperatura y CO2, así como en una irregularidad y descenso en la cantidad de lluvia”.
A priori, pese a que la mayor disponibilidad de CO2 y la subida de las temperaturas conllevaría un aumento de la floración de las plantas e incremento de polen en aire, el investigador indica que “esto no ocurrirá, ya que una menor cuantía de lluvias tiene mayor incidencia negativa en la floración y, por tanto, contrarresta el posible efecto de CO2 y temperatura. Las tendencias serían de disminución en la floración y menor cantidad de polen en el aire para el futuro”.
La catedrática de la Universidad de Córdoba Carmen Galán, coordinadora del equipo en el que han colaborado biólogos de las universidades de Jaén, Santiago de Compostela, Autónoma de Barcelona, Granada, León, Complutense de Madrid, Politécnica de Cartagena, Castilla La Mancha, Vigo, Extremadura, Málaga y Múnich (Alemania), junto al Instituto de Ciencias Atmosféricas y Clima de Bolonia (Italia), valora que esa situación es “un primer paso hacia un grave problema de desertización”. Por su parte, según advierte el propio Ruiz Valenzuela, esta tendencia es más patente y afecta en mayor medida “a las especies herbáceas porque responden más rápidamente a las necesidades hídricas, aunque una prolongación en el tiempo de esta situación traería las mismas consecuencias para las especies leñosas”.
Autor: Gabinete de Comunicación UJA (J.S.T.).
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