Fotografía ilustrativa del artículo
| 21 Sep 2016

La intensidad en las coloraciones de los pollos influye en sus padres a la hora de alimentarlos

Fuente: CSIC

pollowMuchas de las aves que conocemos salen del huevo sin estar completamente desarrolladas y dependen  de sus padres, quienes los alimentan y los mantienen a temperaturas adecuadas en los nidos. Los padres  de estas aves, al llegar con alimento al nido, tienen que elegir qué polluelo alimentar y éstos compiten  entre ellos por conseguirlo emitiendo pitidos conspicuos y realizando movimientos extravagantes
(estiran el cuello, aletean, se levantan y empujan a sus hermanos) para así llamar la atención de los  padres. La intensidad con que los pollos realizan estos comportamientos está relacionada con la  necesidad de los pollos por recibir esa comida y, por tanto, sirven como señales para los padres en su  decisión de a quién alimentar. Los padres también utilizan otras características de los polluelos como es  el tamaño relativo del polluelo en relación con el de sus hermanos, y la coloración de determinadas  partes del cuerpo: la piel, el cielo de la boca y las bandas carnosas que bordean sus picos (boqueras).

“Nos interesó conocer las razones por las que los padres usan la coloración de estas partes, es  decir, conocer lo que indican. Una posibilidad es que indiquen la condición física de los pollos, algo así  como su salud. La otra posibilidad es que la coloración de estas partes esté relacionada con el nivel de  hambre, es decir, cuánto tiempo llevan los pollos sin comer.”,  nos explican David Martín-Gálvez y Juan  José Soler Cruz, investigadores de la Estación Experimental de Zonas Áridas del CSIC y autores del  estudio.

Aunque se han encontrado más pruebas que sugieren la primera posibilidad en varias  especies, en otras parece que las coloraciones de algunas de estas partes indican más bien el nivel de  hambre. Discernir entre estas dos posibilidades es importante a nivel teórico para entender el origen y  la evolución de las coloraciones de los pollos. Sin embargo, diferenciar el papel del hambre y de la  condición física en coloración de estas partes señales es metodológicamente complicado debido  fundamentalmente a que ambas suelen estar interconectadas. Por ejemplo, los pollos que pasan más  hambre suelen ser los que poseen una peor condición física, y aquellos mejor alimentados suelen ser los  más saludables. Sin embargo, también es posible que un pollo en mala condición esté saciado, y que un  pollo en muy buena condición esté hambriento.

En el estudio se empleó un fármaco estimulador del apetito frecuentemente utilizado en niños  y en algunos animales, la ciproheptadina, para manipular la sensación de hambre en pollos durante una  parte de su crecimiento, en una especie de ave común en nuestras ciudades y campos, la urraca. El uso  de este fármaco para discernir entre las posibilidades antes mencionadas tiene importantes ventajas  respecto a las metodologías utilizadas anteriormente, ya que permite aumentar directamente el nivel de  hambre en condiciones naturales, y por tanto se puede cuantificar cualquier cambio en el  comportamiento de los padres como consecuencia de la administración del fármaco. La ciproheptadina  se administró en cada nido a la mitad de los polluelos y a la otra mitad se le dio una cantidad  equivalente de agua, para ser utilizada como control. La coloración de las tres partes del cuerpo se midió  con un espectrofotómetro antes y después del tratamiento.

Los resultados determinaron que las boqueras de los pollos tratados con ciproheptadina tenían  una coloración más conspicua que los pollos tratados con agua, principalmente por que reflejaban más  coloración en la zona del ultravioleta y menos en la zona del amarillo. Además, las bocas de los pollos  tratados con ciproheptadina tenían más amarillo y menos ultravioleta que las bocas de los pollos  tratados con agua. Hay dos posibles explicaciones para estos resultados: una de ellas es que los cambios  en la coloración de estas partes sean consecuencia directa del aumento del nivel de hambre de los  pollos tratados con ciproheptadina. La otra que sea consecuencia de una mejor condición física de los  pollos tratados con ciproheptadina al final del tratamiento, ya que es posible que el aumento del nivel  de hambre pudo haber provocado que los pollos tratados con ciproheptadina fuesen mejor alimentados  que los pollos tratados con agua.

El estudio trata de diferenciar entre estas dos posibilidades explorando la relación existente  entre la coloración y el peso de los pollos tratados y no tratados con el fármaco. Si el efecto producido  por el fármaco era el responsable directo de las diferencias encontradas en coloración deberíamos  encontrar que la relación entre peso y color fuese distinta para pollos experimentales y controles. Los  resultados variaron dependiendo del rasgo que se analizaba indicando que cada carácter proporciona  diferente información. La coloración de las boqueras y la piel está relacionada con el nivel de hambre de  los polluelos, mientras la coloración de la boca indica a los padres cómo de saludable está el pollo.

Estos resultados, por tanto, nos ayudan a entender por un lado el funcionamiento y la  evolución de las coloraciones tan llamativas que los pollos de las aves muestran a sus padres al pedir  comida. Por otro lado, también ponen de manifiesto que los padres pueden utilizar esa información  para decidir a qué pollo alimentar en cada momento.
David Martín-Gálvez, Juan José Soler: Decoding colouration of begging traits by the experimental addition of the appetite enhancer cyproheptadine hydrochloride in magpie Pica pica nestlings Journal of Avian Biology. Doi: 10.1111/jav.00641

Más información:

Estación Experimental de Zonas Áridas
Consejo Superior de Investigaciones Científicas
Ctra. Sacramento s/n La Cañada de San Urbano 04120 ALMERÍA, ESPAÑA +34 950 281045
Almudena@eeza.csic.es

Últimas noticias

El aumento de la temperatura incrementa la cantidad y número de desprendimientos rocosos en alta montaña

Investigadores del Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN-CSIC) y la universidad de Ginebra, Suiza, han documentado como el calentamiento favorece el aumento de los desprendimientos de rocas en alta montaña.

Sigue leyendo

Un estudio analiza la distribución de los mosquitos transmisores de la malaria en España

Un estudio reciente coordinado por investigadores de la Estación Biológica de Doñana (CSIC), el Centro Nacional de Epidemiología del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) y el Área de Epidemiología y Salud Pública (CIBERESP) del Centro de Investigación Biomédica en Red (CIBER-ISCIII) ha analizado la distribución del principal mosquito transmisor de paludismo presente en España.

Sigue leyendo