Volver

Fotografía ilustrativa del artículo

¿Qué es el control biológico de plagas?

Es una técnica que se aplica de manera ancestral para el control de plagas, pero no fue hasta el siglo XIX cuando se reconoció como uno de los métodos más importantes de control en agricultura.

Se define como el uso de organismos vivos por parte del ser humano de manera directa o dirigida para reducir la densidad de una plaga por debajo del umbral económico de daño, es decir, por debajo del nivel de población de plaga que no causa perjuicios económicos considerables. La aplicación de las técnicas de control biológico se basan en principios científicos de la Ecología y de la Agricultura de la Conservación, puesto que es fundamental para su éxito conocer el comportamiento de insectos auxiliares, considerados como fauna beneficiosa, y su relación con estos hábitats.

Aunque en los años 40 el control biológico prácticamente dejó de aplicarse en la mayoría de los países debido a el gran desarrollo de productos fitosanitarios por parte de la industria química, a partir de los años 70, se produjo un nuevo impulso en la aplicación del control biológico. Este hecho se debió principalmente a los problemas derivados de la aplicación de plaguicidas, como por ejemplo, el desarrollo de resistencias a las materias activas en algunas especies y la contaminación medioambiental, junto a una creciente demanda de una agricultura sostenible.

Un ejemplo clásico, considerado uno de los mayores éxitos obtenidos en el ámbito mundial, fue el control de la cochinilla acanalada, Icerya purchasi, que es una plaga importante de cítricos. El problema se resolvió introduciendo un depredador procedente de Australia. Concretamente, un escarabajo del grupo de las populares mariquitas, cuyo nombre científico es Rodolia cardinalis. Esta técnica se aplicó en California en 1988 y en vista del éxito obtenido, se repitió en otras partes del mundo. Actualmente, el uso de especies exóticas como fauna beneficiosa para controlar las plagas se encuentra en pleno debate entre la comunidad científica.

Para saber más: IFAPA-Guía app