La biodiversidad oculta de los ecosistemas
El ser humano aborda y analiza cada reto, situación o hecho rutinario utilizando primero el sentido de la vista. Es la manera que tenemos de interactuar en primer lugar con la realidad que se presenta ante nosotros de manera más inmediata. Pero como sabemos, en muchos casos puede llevarnos a análisis o valoraciones erróneas.
Imaginen un río, pero no cualquier río, un río seco o como se denominan por Andalucía oriental, una rambla. Aparentemente observamos un cauce seco, pudiendo trasladarnos la sensación de inhóspito. Pero no hay nada más lejos de la realidad, pues nos encontramos ante un ecosistema que se caracteriza precisamente por esos largos periodos de ausencia de agua.
La flora y fauna presenta adaptaciones muy específicas para poder soportar periodos secos, pudiendo encontrarnos con especies de invertebrados, anfibios o peces que permanecen enterrados en estado latente a la espera de la llegada de las primeras lluvias.
En el caso de las plantas, estas cuentan también con adaptaciones tanto morfológicas como metabólicas que les permiten aguantar estos periodos de sequía.
Las ramblas, debido a esa percepción general entre los habitantes como «espacios carentes de vida», sufren ciertos maltratos, como el arrojo de basuras y escombros, el uso de los cauces como pista de acceso para vehículos a fincas aledañas o la retirada de la vegetación de ribera como medidas de «limpieza del cauce». Este tipo de acciones repercuten de manera negativa en la dinámica de estos ríos, ya que cuando llega la estación lluviosa, pueden provocar retenciones por acumulación de residuos en determinados puntos del curso del río y, en el caso de desaparición de la vegetación de ribera, no se produce el efecto de ralentización de las avenidas al avanzar la masa de agua a lo largo del cauce, produciéndose efectos más devastadores.
Cualquier ecosistema cuenta con una biodiversidad oculta y una fragilidad asociada siendo muy importante que aprendamos a identificarla utilizando todos nuestros sentidos. La ciencia nos ayuda en esa tarea.
Información adicional:
Rodríguez-Lozano P, Leidy RA & Carlson SM (2019). Brook lamprey survival in the dry riverbed of an intermittent stream. Journal of Arid Environments, 116: 83-85. doi: 10.1016/j.jaridenv.2019.04.016.